Trabajadores y trabajadoras de Viedma y del interior de la provincia salieron hoy con los máximos cuidados, barbijo y distanciamiento, pero reclamando a un gobierno insensible que nos quitó la mitad de salario en poco tiempo. Si no hubiéramos estado en contexto de pandemia hoy estarían en la calle más de 8000 compañeros y compañeras en la provincia. Hoy, el mínimo de un agente público, solo siguiendo la inflación debería llegar a los 60.000 pesos y un profesional de inicio no podría estar ganando menos de 110.000 pesos y ser todos parte de la recuperación económica de esta provincia, porque los agentes del Estado comemos, nos vestimos y vivimos consumiendo y aportando al movimiento de la economía de cada una de las localidades y, por sobre todo, trabajamos a diario para llevar servicios públicos a cada uno de los ciudadanos de esta provincia.
“Agradecemos a todos los compañeros y compañeras que se sumaron a este inicio de medida en Viedma y en cada una de las localidades del interior. Hasta los parajes acompañaron en este grito a los gobernantes, porque las personas que prestamos servicios en el Estado no damos más… y no es por la pandemia y el contexto económico, que tampoco explican ni transparentan en que se gastan el dinero, es porque vienen ajustando sin parar desde hace un tiempo y siguen poniendo en la espalda de los trabajadores todo el peso”, dijo el secretario general de UPCN , Juan Carlos Scalesi
Hoy la UPCN dio inicio a las medidas de fuerza para que el gobierno vea el descontento del 71% de los trabajadores que trabajan en la Administración Pública de esta provincia, con una carrera administrativa achatada totalmente y cobrando salarios a los que les falta el 60% que fue‘comido’ en dos años y medio.