UPCN RIO NEGRO DECLARÓ EL ESTADO DE ALERTA Y MOVILIZACIÓN Y SE ACABÓ LA CONTROVERSIA POR EL HORARIO DE LOS TRABAJADORES ESTATALES
A mediados de semana la relación entre el Gobierno de Río Negro y la UPCN, sindicato mayoritario de los estatales provinciales, llegó a un punto de tensión que puso en peligroso la costosa paz social que supieron conseguir semana.
El Gabinete Provincial, analizó la alternativa de cambiar el horario a los trabajadores con la excusa de ahorrar energía.
Luego de esa reunión, hubo funcionarios que se comunicaron con el Secretario General de la UPCN para informarle sobre el análisis de esa cuestión.
La respuesta no se hizo esperar más de una hora, y fue de manera pública y masiva. Todos los medios de comunicación provincial reflejaron el anunció oficial del sindicato que inmediatamente declaró el Estado de Alerta y Movilización en toda la provincia, situación que alertó a la opinión público ya que a los ojos de la prensa parecía una señal de quiebre para la buenas relaciones que viene manteniendo el Estado con sus trabajadores, luego de la inolvidable crisis que supo generar el gobierno, también radical, de Horacio Massaccesi.
UPCN dio a conocer un fuerte documento indicando que; “Ante consultas realizadas por funcionarios provinciales al Secretario General de la UPCN, Juan Carlos Scalesi, en referencia a un inminente cambio de horario para los trabajadores de la administración pública de Río Negro; el Sindicato estatal decidió declarar el Estado de Alerta y Movilización en toda la provincia, como primer paso para oponerse a la arbitraria medida.”.
Sigue el parte de prensa asegurando que “Con la excusa de que se va ahorrar energía, el gobierno provincial pretende cambiar el horario de los empleados públicos provinciales, a sabiendas de que esto no representará un verdadero beneficio. Está claro que este pretendido ahorro no se notará en el consumo energético de todo el País. “Es sólo una medida simbólica y política,” sin tener en cuenta que sólo acarreará problemas a la familia estatal, en vez de soluciones o ahorro alguno.”
“Quienes toman esta resolución no tienen en cuenta que cada empleado estatal forma parte de una familia, que muchos tienen hijos a quienes darles de comer a un hora normal y que justamente a nuestro sector no le sobra dinero como pagar quien haga las tareas del hogar y atienda a nuestros hijos…”
Finalmente el sindicato sentenció: “La UPCN quiere dejar bien claro que si el Gobierno avanza con esta absurda y caprichosa decisión, el sindicato avanzará con las medidas necesarias para frenarla o para que el Estado pague en efectivo y como refrigerio la pretendida diferencia horaria.”
Scalesi recordó que el Ministro de la Producción, Juan Acattino, declaraba que la medida “era un gesto de acompañamiento del gobierno frente al importante esfuerzo” que realizan las industrias y los productores soportando las restricciones energéticas. Las declaraciones las realizó diez días después de haber llegado de un viaje oficial a Israel, el que seguramente realizó en un bote a remo para no gastar en viáticos internacionales y pasajes en avión, como “gesto” de acompañamiento al esfuerzo de los industriales, los productores y el que esta semana pidió a los trabajadores públicos.
UNA MUERTE ANUNCIADA
La semana terminó sin el anunciado cambio de horario, Según trascendió el Gobernador Miguel Saiz, que ni siquiera estuvo en la “reunión de gabinete sin Gobernador”, en la que se originó esta creativa y política idea del nuevo horario para los empleados públicos rionegrinos. Puso las cosas en su lugar y según trascendió la iniciativa terminó con una “tirada de orejas generalizada,” a unos más y a otros menos y todos junto al cadáver del cambio de horario para estatales, evitando así romper lazos con la UPCN Río Negro, gremio con quien Saiz sabe, es mejor tenerlo en su propia vereda y no en la vereda de enfrente.
