Ante los reclamos, las y los legisladores del partido gobernante justificaron sin un ápice de vergüenza que “no hubo ‘impuestazo’, hubo inflación y devaluación”. Mientras tanto, los salarios de agentes de la Administración Pública no se actualizan a la inflación desde 2018, alcanzando a día de hoy un promedio de 75% de quita salarial. Muchas y muchos compañeros apenas sobrepasan los $40.000 mensuales y la mayoría no pasa los $65.000. A fines de diciembre ya se necesitaban $54.207 de ingreso mensual para cubrir la canasta básica de una ‘familia tipo’ (INDEC).
Para demostrar aún más la falta de empatía del Gobierno de Río Negro, le agregamos la posibilidad de que la planta de funcionarios reciba una suba de sus sueldos de $60.000 en promedio. Esta semana, mediante tres notas enviadas a la secretaria de la Función Pública, desde la UPCN solicitamos información al respecto y, de momento, solo recibimos respuestas parciales llenas de evasivas.
Los impuestos provinciales suben, los precios de los productos y la canasta básica suben y los salarios bajan sin pausa desde hace tres años. Hoy, la mayor parte de los agentes de la Administración Pública tenemos salarios que no cubren la canasta básica total y el gobierno sostiene tozudamente una gobernanza cerrada al diálogo genuino, ciega a las necesidades, limitándose a generar enunciados (algunos a través de obvios socios, como la Ate) carentes de toda conexión con la realidad económica y social de la provincia en general y de los trabajadores que llevamos adelante los servicios del Estado en particular.